Un elemento fundamental dentro de la estimulación temprana es proporcionar al niño las actividades que le permitan satisfacer su iniciativa, temprana curiosidad, y desarrollo integral, adecuados a su entorno familiar. Las actividades generan confianza en los papás, al interactuar con su hijo y de esta manera fortalecen su autoestima…
Se sugiere que las actividades se realicen diariamente ó por lo menos tres veces a la semana.
Preferentemente deben participar ambos papás.
No se deben realizar ejercicios después de ingerir alimentos.
En caso de que el niño no quiera realizar la actividad, no forzar la situación.
Acompañar las actividades con canciones y juegos.
Y festejar los logros.
Es importante recordar que:
🧡 La aplicación de la estimulación temprana debe ser oportuna y efectiva, de acuerdo con la edad cronológica y el desarrollo previsto para dicha edad, considerando la individualidad y particularidad de cada niño.
🧡 El desarrollo es continuo, dinámico, armónico e integral. Las diferentes etapas y áreas del desarrollo son divisiones un tanto arbitrarias, donde se señala lo más característico de éstas, para facilitar las técnicas de estimulación.
🧡 La cantidad y tipo de estímulos deben estar estrechamente relacionados con las capacidades e intereses del niño.
🧡 Los momentos cotidianos del niño son ideales para estimularlo (el baño, la comida, etc.) y favorecen la interacción afectiva.
Bibliografía: Estimulación temprana, lineamientos técnicos – Instituto Mexicano del Seguro Social.