Para un niño o una niña (desde el 1° año hasta el 3° año), jugar es mucho más que un pasatiempo, porque el juego pone su cerebro en funcionamiento de manera divertida.
✨ Ahora ya son capaces de ponerse sus propias metas y de persistir hasta alcanzarlas, experimentando por ello una satisfacción particular.
✨ Disfrutan imitando lo que hacen los demás, que es una manera muy buena de aprender muchas cosas.
✨ Durante el segundo año de vida aparece el juego simbólico. ¡Muy buena noticia!: indica que el desarrollo de los niños marcha muy bien y que ya pueden imaginar.
✨ Pocos meses después de poder empezar a jugar al «como si», también pueden comparar objetos y disfrutar organizándolos de acuerdo con algún criterio de forma, color o uso que solo ellos saben.
✨ Una vez que su imaginación despertó, empiezan a poder «inventar»; un palito podrá ser una cuchara y una hoja de árbol un avión.
Bibliografía: ¿Mucho, poquito o nada? guía sobre pautas de crianza para niños y niñas de 0 a 5 años de edad – UNICEF.