Desde su sexto mes de vida, el bebé debe comenzar con alimentos adicionales a la leche materna. Para facilitar esta transición te recomendamos lo siguiente…
1. A medida que el niño vaya creciendo, ofrecerle alimentos preparados en forma sencilla, ya sea cocidos, asados o fritos y con poca sal, azúcar y condimentos.
2. Dar la carne o huevo siempre cocidos o cocinados.
3. Probar el alimento antes de dárselo para verificar que la temperatura y el sabor sean adecuados.
4. Dar los líquidos como agua o jugos naturales en taza o con una cucharita para evitar el uso del biberón.
5. Dar durante cuatro o cinco días el mismo tipo de alimento e ir agregando gradualmente otros alimentos además del anterior.
6. Suspender el alimento en caso de rechazo por parte del niño, e intentar dárselo después preparado en otra forma.
7. Crear un ambiente agradable y alegre a la hora de las comidas pequeño con la familia, esto le ayudará en su crecimiento físico y en su desarrollo social.
8. Dejar que reciba diariamente los rayos del sol en forma directa por lo menos 15 minutos; esto le ayudará a obtener la vitamina “D” que su cuerpo necesita para calcificar sus huesos.
Bibliografía: Guía de alimentación complementaria – Secretaría de Salud.