Has vivido ya una parte crucial de esta aventura. El embarazo, el trabajo de parto, el nacimiento y la rutina hospitalaria han quedado atrás, y ahora llegas a casa dispuesta a comenzar una nueva vida, junto a tu bebé. Pero en el instante en que cierras la puerta de entrada dejando atrás el hospital, las dudas y temores en relación con el manejo de tu hijo se asoman: ¿Tendrá hambre? ¿Querrá dormir? ¿Por qué llora?…situaciones nuevas te sorprenderán cada día, pero ninguna superará la sensación tan especial de tener a tu bebé en casa.
El primer día del bebé puede ser también tu primer día más difícil. Pregunta todo lo que se te ocurra, es el modo ideal de anticiparte a las situaciones más comunes.
💜 El pecho.
No te aflijas si el primer día tu bebé no se prende. Si te lo recomendaron en el hospital, extrae el calostro para alimentarlo, pues podría facilitar la situación. Sigue las indicaciones que te dieron los primeros días en el hospital y trata de darle el pecho a demanda, unas 8 veces por día. No dejes pasar más de 4 horas entre cada toma.
💜 El sueño.
Tu bebé dormirá con frecuencia y a lo largo de todo el día, y sus períodos más largos coincidirán con el horario de la noche.
💜 El llanto.
Es probable que escuches a tu bebé llorar muchas veces el primer día. Y no te sorprenda por la fuerza de su llanto, ni por tu capacidad para reconocerlo: los bebés expresan sus necesidades de este modo; poco a poco aprenderás a interpretarlo y satisfacerlo.
Bibliografía: Bienvenido bebé, guía completa para el cuidado del recién nacido de 0 a 3 meses – UNICEF.
